"No vayas a ese restaurante, sirven fría la sopa", nos dice un amigo.
¿Cuál es tu experiencia?, le cuestionamos, porque yo he oído otra cosa.
"Fui el día de su inauguración. La sopa estaba fría. No he vuelto".
Así son nuestros juicios sobre las personas, sobre su trabajo.
El joven médico nos curó mal. El flamante arquitecto dejó un muro chueco.
Treinta años después, seguimos hablando del médico y el arquitecto maletas.
No asimilamos su larga experiencia, sus estudios posteriores, su madurez.
Se nos olvida que nosotros no somos ni la sombra del de hace 30 años.
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