domingo, 25 de noviembre de 2012

CONTRALUZ por María del Carmen Maqueo Garza


TIEMPO DE REGALOS
Hay cosas tan poderosas, que  se  expresan en   unas cuantas palabras.
   Jeremy Bowen, editor de la BBC para Medio Oriente, en su editorial del pasado viernes 22  transcribe los cuatro deseos de una pequeña palestina,  refugiada  junto con su familia  en una escuela.  Salieron corriendo de su casa, ubicada en un vecindario aledaño a la frontera con Israel,  minutos antes de que  el caserío fuera bombardeado.
   Esta vez se ha salvado, tuvo algo qué cenar aquella noche, y fue justo en el cartón de la galleta que consumió, donde en un muy buen inglés la chiquilla de trece años plasma sus deseos:
-          Deseo detener la guerra.
-          Espero vivir una vida feliz.
-          Espero estar en paz por siempre.
-          Sueño feliz.
   Lo que el propio Bowen llama “un frágil cese al fuego” mantiene  la Franja de Gaza en la zozobra,  después de que en el primer día de la tregua entre israelíes y palestinos anunciada por Egipto, Israel atacó en un terreno considerado como neutral,   teniendo por resultado un palestino muerto y ocho heridos.
   Esta realidad geográficamente muy lejana, toca los corazones de cualquiera de nosotros, y contrasta de manera grosera con los ridículos desfiguros de  los consumidores de “primer mundo” que acudieron a  diversos almacenes norteamericanos durante el “Viernes Negro”.  Circula en youtube un video que da cuenta de ello,  la clientela en el departamento de electrónica se muestra incontenible, por lo que los cuatro o cinco empleados ponen cara de susto, y no hallan qué hacer. En cuanto aquella multitud   alcanza  el botadero en donde se hallan los teléfonos móviles surge la fiera que cada uno de ellos lleva dentro, y se empujan, se arrebatan y se gruñen los unos a los otros.  La brevedad  del video no permite saber en qué terminó aquello, y  deja a la imaginación suponer lo que haya seguido después, pero algo es cierto, después de ver  la colosal rebatinga no es de extrañar entonces que alguien saque un cuchillo para conseguir un aparatejo de aquellos, como efectivamente sucedió el pasado viernes en una tienda de electrónicos en el estado de California.
   ¿Tener el modelo más reciente? ¿Conseguirlo a medio precio? ¿Comprarlo antes que el resto de los consumidores?... Son algunas de las trampas con que el mercado gancha nuestras neuronas para llevarnos de manera bastante irreflexiva a poner en riesgo la cartera, la integridad y la vida en aquellos zafarranchos.  Es más, este año algunas tiendas adelantaron las ofertas iniciando desde el jueves por la noche, lo que resultó en que muchas familias norteamericanas  cancelaran la tradicional cena  de Acción de Gracias para correr a las tiendas.
   Mi temperamento no va con aquellas aglomeraciones donde no se puede ni respirar.  Confieso, jamás he puesto un pie en las tiendas norteamericanas durante un  viernes negro, sin embargo he recogido  muchas historias de  quienes acostumbran hacerlo año con año. Viviendo en frontera, muchas de ellas se van de campamento al estacionamiento de los centros comerciales, en preparación para entrar a las cuatro o cinco de la mañana, en cuanto abre la tienda.   La historia que más se me grabó fue la de una señora que adquirió cuarenta muñecas Barbie y tres cortadoras de césped, aún cuando no  tenía ni la más remota idea de qué iba a hacer con toda  esta mercancía.  A ese grado llega la locura colectiva propia de la ocasión.
   Curiosamente hoy que se publica este texto estamos a un mes de la Navidad, fecha en la que tradicionalmente abundan los regalos.  Yo quiero quedarme con los deseos plasmados por la chiquilla palestina en un pedazo de cartón, para hacerlos míos durante esta temporada, y contribuir en la medida de lo posible para frenar cualquier guerra en mi entorno inmediato, que se fomente la paz, y  se trabaje por cumplir los sueños de todos los niños del mundo.  Esos sueños que no aparecen en una lista de Navidad o de Reyes,  y que son simples condiciones de vida capaces de garantizar la  seguridad y el bienestar de los que están en grave riesgo a causa  de las guerras  emprendidas por ambición, o por un mal entendido deber sagrado.
   Ojalá que en estas festividades, a la par del regalo al amigo  adquiramos un obsequio  para el más desamparado.  Nada ostentoso, nada que vacíe los bolsillos, pero sí algo que llene el corazón: Una despensa, un cobertor, una camiseta, un par de guantes.   Elementos que para nosotros no representan un gasto mayor, y que para una criatura pueden significar la diferencia entre dormir o no hacerlo,  a causa del frío.
   Quede como consigna para estas fechas el mensaje plasmado en un pedazo de cartón por una pequeña palestina quien, a diferencia de otros muchos,  se  niega a dejar de creer en los  milagros.

COSAS NUESTRAS por Jorge Villegas

Opinión
La opinión pública era una matrona despaciosa y cautelosa.
Entre la noticia y la opinión pasaban varios días.
Hoy todo es instantáneo: La información vuela en las redes sociales.
Le pisan los talones las opiniones de los ciudadanos.
No hay tregua para la reflexión ni oportunidad para la confirmación.
Ya no hay tiro de precisión, sino ráfaga de información sin digerir.
Por eso se requiere hoy un ciudadano alerta, pero cauteloso.
Que siga la receta bíblica: Examinarlo todo, retener lo bueno.
jvillega@rocketmail.com

SINFONÍA DE LA CIENCIA

Un video musical que da cuenta del desarrollo de la ciencia en el mundo.

CARTA DE JOAN MANUEL SERRAT a los palestinos de Gaza

Valioso texto que el compositor español nos da a conocer esta semana; expresa su sentir muy personal frente a la terrible situación que se vive en la Franja de Gaza, en Medio Oriente.
Es con el corazón apesadumbrado que les escribo hoy. Gaza está ardiendo. La frontera con Israel está bajo fuego. Niños en ambos lados de la frontera están aterrorizados, traumatizados, heridos en cuerpo y alma . ¡Valiosas vidas se pierden a cada instante! ¡Corre la sangre! ¡Abundan el dolor y las lágrimas! Lamentablemente éso nos es familiar, demasiado. Estoy sentado en mitad de la noche en mi hogar catalán junto al mar. Ese mar que es nuestro, el Mediterráneo, nuestra cultura, el de nuestro pueblo andariego, el de los sin hogar, los nostálgicos, los constructores, los sobrevivientes. Nuestros sueños son como las olas, y dialogan con la luna y las estrellas sobre la eternidad. Desde ese fatídico día de 1995 cuando asesinaron a Rabin, dediqué gran parte de mi vida pública a cantar y a hablar por la paz entre judíos y palestinos. Vi el proceso de paz levantarse y caer como los senos de una mujer respirando durante la noche. Vi luchas, oportunidades desperdiciadas. Lamentablemente mucha obstinación, ignorancia y estrechez de miradas se cruzaron por el camino. Un absurdo orgullo pisoteó numerosas esperanzas. Canté y hablé. A veces discutí y abracé a extraños. Muchas veces me conmoví hasta las lágrimas e hice los amigos más inesperados. Amigos por quienes cruzaría fronteras bajo fuego para darles protección. Y hoy yo digo esto: tenemos un enemigo común, un enemigo terrible, y tenemos que unirnos para vencerlo. Ese enemigo es el fanatismo, amigos míos. Ese enemigo es el extremismo en todas sus grotescas manifestaciones. Ese enemigo está encarnado por todos aquellos que colocan a Dios por encima de la vida, que pretenden que Dios es su espada y su escudo y que combaten por él. Todos ellos son víctimas de un horrible fanatismo. Yo a menudo hablé contra el fanatismo en mi país, porque lo considero detestable. Muchas veces arriesgué mi carrera y mi bienestar en esa lucha. Ahora veo el horrible rostro del fanatismo, veo sangre en sus manos y conozco uno de sus muchos nombres: Hamas. Ustedes conocen a este terrible monstruo. Saben que viola a vuestras mujeres y envilece a las inocentes mentes infantiles. Ustedes saben que educa para el odio y la muerte. Ustedes saben que es chauvinista y violento, codicioso y egoísta, y que se nutre de vuestra sangre mientras evoca el nombre de Alá en vano, se oculta como un ladrón y utiliza a inocentes como escudos humanos, utiliza mezquitas como arsenales, miente y estafa, y los usa a ustedes como rehenes. ¡Yo sé que eso es verdad y que ustedes lo saben! Pero no pueden hablar por miedo. Pero yo sí puedo hablar. Tengo el privilegio de vivir en una democracia donde las mujeres no son objetos, sino ministros, donde un cantante puede decir lo que se le antoja. Yo sé que ustedes no tienen ese privilegio (pero estoy seguro de que algún día lo alcanzarán, inshalla). Yo sé que ustedes están hartos de ser mantenidos como rehenes por ese demonio, esa terrible bestia, que está en Gaza , pero también está en Irak, en Afganistán y en todas partes. ¡Pero ustedes son un pueblo destinado a florecer en paz! ¡Su majestuosa historia ofrece abundantes testimonios de creatividad en la literatura, la ciencia, la música! A veces los veo en las calles, haciendo manifestaciones de apoyo a los monstruos, gritando muerte a los judíos, muerte a Israel . Pero yo no les creo. ¡Sé dónde está vuestro corazón! Está donde está el mío, con mis hijos, con la tierra, con el cielo, con la música, con la esperanza. Yo sé que en el fondo de vuestros corazones ustedes desean la derrota de la bestia llamada Hamas que los ha aterrorizado y asesinado, que ha convertido a Gaza en un estercolero de pobreza, enfermedad y miseria, y los ha sacrificado en su sangrienta locura de orgullo y codicia. Mis hermanos, lloro por ustedes y también por nosotros. Lloro por mis compatriotas que sufren por las bombas de ETA arrojadas en todas partes. Lloro por los soldados secuestrados y muertos, por las familias enlutadas, por la inocencia perdida para siempre. Pero lloro especialmente por ustedesporque conozco vuestro sufrimiento. Sólo espero que Israel pueda hacer la tarea que debe ser hecha y finalmente logre librarlos de este cáncer de fanatismo llamado Hamas. Y espero que un resto de compasión aún exista en sus corazones para que dejen de usarlos a ustedes y sus hijos como escudos humanos. Y quizás tengan una oportunidad de caminar despacio el uno hacia el otro y daros tímidamente las manos, miraos en los ojos llenos de lágrimas y deciros con voz ahogada: "Shalom, salam. Ya basta. Ya basta, hermano mío". ¿Quieres un café? Quédate un poco, hablemos, conocemos las palabras y las canciones y sabemos cuál es el camino. Shalom. Salam. Con un corazón quebrado que aún añora el amor. Vuestro amigo, Joan Manuel Serrat. Tomado de http://informe21.com/arte-y-espectaculos/carta-joan-manuel-serrat-los-palestinos-gaza el 20/11/12

EL CORO QUE SE PERDIÓ canta Mad World.

Sucedió en Alemania: Un coro infantil que conforme avanza el desarrollo de la pieza musical, va perdiendo uno de sus miembros, hasta quedar un solo niño en el centro del foro. Nos llama a tomar conciencia de que en el mundo muere un niño cada tres segundos a causa de problemas totalmente previsibles, y nos llama a actuar para corregirlo.

AMOR, ADIÓS Y DEMOCRACIA: Poesía de Gabriel Badillo en su Ícono de Agosto 2012



Se van tus manos; dejaron de apretar mis dedos,
pero entiendo que siempre fueron tuyas...
tan tuyas como tu voluntad y tu escritura.
Dejó de agitar el aire tu vestido,
y de sembrar incienso tu perfume.
Pero... ¿Se puede poseer el aire?
Dejaron de cruzarse las miradas, de coincidir y traspasar el alma.
Dejó de arrojar flechas de fuego, la profunda intensidad que hay en tus ojos...
capturarlos, es intentar preservar, el brillo de las estrellas en el alba.
Ya no son tus pasos el cascabel de la mañana;
ni tus tacones presurosos la música de buenos días.
Conservarlos a la fuerza, es encerrar a un gorrión de primavera,
y esperar que siguiera cantando.
Hoy se enfría tu café. Y tu lugar en la cama.
Tu boca y tu cuerpo son dos águilas de lumbre, que remontaron el vuelo;
en el viaje supremo e irrevocable del derecho a la libertad.
Y mis ojos las miraron hasta hacerse un punto en las nubes.
Y te desearon paz.
Un lobo negro se robó tu corazón, y lo metió en un cuadro.
El miedo le heló la sangre, y comprando seguridad, empeñó las ilusiones.
Las matemáticas lo volvieron analítico.
Pero sabes… conserva sus alas. Y eso es hermoso.
Y con ellas se marcha, quiera Dios, a mejores cielos.
¿Existe un amor real sin que este sea espontáneo?
La brisa sopla porque es su naturaleza; nadie ha de inducirla.
la Monarca Canadiense, emigra puntual a su cita con el sur… jamás lo olvida.
y la luna, aunque sientas que el cielo se derrumba, seguirá asomándose por las noches.
la naturaleza no necesita recordatorios… el amor tampoco.
Soltar a veces duele; pero el amor real es una medicina…
y la autenticidad para el corazón, es como la democracia para el político honesto…
te nace amarla y defenderla con todas tus fuerzas…
aun a pesar, de que en ocasiones no te favorezca.
Icono de agosto 2012 es una publicación de Gabriel Rubio Badillo para Grupo Freedom.
Agradecemos comentar y compartir con sus contactos. De corazón, mil gracias por leernos.

EL HOGAR ESTÁ DONDE SE HALLA EL CORAZÓN por Iliana Yahav

Buen momento para recordar el arte en arena de la rusa Iliana Yahav, que exalta valores de primer orden para nuestro mundo.