domingo, 5 de marzo de 2023

CONTRALUZ por María del Carmen Maqueo Garza

 

NO ES EL CAMINO

Uno de los graves problemas de México, que nos  coloca con una mala calificación a nivel mundial, es la criminalidad: desde el ladroncillo que roba una bolsa de cacahuates, o el “viene viene” al que damos una moneda para que no raye nuestro vehículo, hasta los grandes delincuentes cuya participación es clave en el trasiego de drogas, armas y dinero en efectivo, atravesando por toda una gama de delitos que lastiman a la sociedad, es que nuestro país ocupa uno de los primeros lugares en criminalidad en el planeta tierra.

El pasado fin de semana ocurrió una más de esas masacres que pintan de rojo el suelo mexicano, en particular en algunas regiones del país.  Inicialmente yo entendí que había sido en el límite fronterizo entre Nuevo León y Tamaulipas, en una carretera moderna y bien trazada, con atractivos turísticos, que, paradójicamente, no deja de ser riesgosa de transitar.  Unas horas después se dieron a conocer mayores precisiones de lo ocurrido: El evento sucedió dentro de la mancha urbana.   Hasta el momento cuando esto escribo la información dista de ser clara.  Se habla de un vehículo dentro del cual viajaba un grupo de jóvenes provenientes de un centro nocturno. Al parecer circulaban a alta velocidad.  Se cree que coincidieron con un comando de la SEDENA. En algún momento hubo disparos en contra de los tripulantes del vehículo, y el saldo es de cinco jóvenes fallecidos y dos sobrevivientes.   Los familiares de los afectados recogieron el testimonio de algunos vecinos y dan una versión.  Los militares, luego de un silencio de 48 horas, dan una versión distinta de los hechos.  Los primeros sostienen que los militares abrieron fuego sin mediar nada más; los militares aducen que repelieron un ataque de los civiles.

Los cuerpos de los fallecidos ya han sido entregados a sus familiares; los dos sobrevivientes continúan  bajo observación médica, y el General Luis Cresencio Sandoval, Secretario de la Defensa Nacional,  acaba de anunciar la sentencia  en contra de cuatro cabos del convoy involucrado en la masacre, por desobediencia.

Hay que señalarlo: Los delitos que devienen en inseguridad, tantos y tan variados en nuestro querido México, no se resuelven ejerciendo mayor presión en contra de la población.  Mi modesta opinión es que no se corrigen colocando un policía en cada esquina, y mucho menos  –lo estamos viendo—, enviando tropas  militares  a ejercer funciones civiles.  Su formación es otra, para la defensa del país.  Dentro de lo que argumentan los elementos castrenses involucrados, es que escucharon un estruendo proveniente del vehículo en movimiento y por ello dispararon.  Se entendería que así haya sido conforme a su formación  como militares, indicativo de que colocar a la SEDENA haciendo funciones civiles no es, en absoluto, lo más recomendable.

Para  cuestiones a las que no hallamos soluciones fáciles, nos remitimos al pensamiento mágico.  En ocasiones hasta “aluxes” andamos anunciando, en un afán de distraer la atención de otras cosas.  A este mismo pensamiento fantástico recurro cuando trato de entender por qué los mexicanos nos sentimos con tanto derecho a faltar a la verdad y a romper las reglas.  Hurgando los orígenes me voy hasta tiempos de la Conquista, tratando de dilucidar si viene desde entonces el enojo contra los de nuestra misma raza, de modo que no alcanzamos a concebir que robar, o sacar ventaja de un cargo, o irse por la libre, perjudica a la sociedad.  Tampoco podemos cobijarnos en la  hipótesis “cultural” de que el que no transa no avanza, así haciendo ver al más astuto como el más aventajado.

Algo debe haber en la médula de nuestra constitución mestiza; algo que nos dificulta ver con claridad los límites entre el bien y el mal.  Tal vez sea la formación familiar, si los padres lo hacen, los hijos también.  Quizá sea una omisión en la atención: los padres no lo hacen, no vigilan a los hijos y estos se van por el camino fácil.  O un tercer panorama: sin importar la dinámica familiar, un  individuo comienza con asuntos chuecos, le va bien, continúa y se diversifica.  Sus cercanos resultan beneficiados en lo material, por lo que no cuestionan, simplemente disfrutan.  Ello explicaría que el grado de corrupción en nuestro país no tenga correspondencia con los orígenes familiares o el nivel educativo de  tantos delincuentes de cuello blanco, que de tiempo atrás han amasado fortunas multimillonarias.

La inseguridad tiene un origen antropológico, o social, o familiar, o emocional.  Cuando la autoestima es baja, se buscarán elementos externos para reforzarla.  Con desplegar fuerzas del orden a lo largo y ancho del país y sus instituciones, poco o nada se ha de lograr.

Querer resolver un problema social por la vía militar no es el camino.  En definitiva.

CARTÓN de LUY

 


Salut Salon con música de Astor Piazzolla

 
Pueden activarse subtítulos y traducción al español para seguir la presentación del grupo del alemán original.

TRAER HIJOS AL MUNDO



La idea de criar hijos no es para que tengan que acompañarte cuando tú estés más anciano o anciana.
Ni cuidarte.
Ni mantenerte.
Ni estar al pendiente de ti todos los días.
La idea es que asumas la responsabilidad de criar humanos funcionales. Hijos o personas realizadas, sanas, prósperas, comprometidas y responsables con la naturaleza y con la sociedad.
Que sean libres y sin complejos.
Que aporten a la sociedad y sobre todo a su persona.
Que sean su mejor versión, día a día.
Y eso implica saber que no te pertenecen. Los hijos no son tuyos.
Pero sí, que te quede muy claro que tú como padre o madre, eres la vía para que vinieran al mundo, y que NO eres su mundo. Y que eres responsable de crear un mejor mundo y enseñar a tus hijos a crear un mejor mundo.
Y desde esa convicción se cría lindo.
Se construyen alas.
Y se programa el vuelo.
Se les deja en libertad sin culpas y sin quejas, cuando abran sus alas e inicien su vuelo.
Para que tengan la confianza y seguridad de volver cuando necesiten recargar el cariño.
Y NO porque te deben algo.
Simplemente porque educaste en amor, en libertad, en paz, y no educaste en miedo, no en esclavitud, no en intranquilidad.

Quise rastrear para dar con el autor original. Parece ser un colegio "María Montessori Tenochtitlan", cuya página me negó el acceso para. verificarlo Queda entonces como texto tomado de la red.

La verdad oculta detrás de TikTok con Marian Rojas Estapé

CONFETI DE LETRAS por Eréndira Ramírez

 



Hay quien busca en la vida los motivos para ser feliz, por pocos que tenga a su alcance, a ello se aferra, siempre encuentra un porqué, un por quien sentir que cada día vale la pena. Afronta la adversidad, vence sus miedos y no se deja avasallar por ellos, porque ha aprendido que no se puede avanzar cuando el temor nos invade, nos paraliza, nos desmotiva.

Hay quien encuentra en la mayor obscuridad, una luz que lo guíe, es ser privilegiado cuyo espíritu ilumina sin necesidad de mayor artefacto los sombríos destinos que la vida le ofrece, no se pierde en la incertidumbre por mucho tiempo, porque tiene la fe suficiente para poder saltar los obstáculos, sabiendo que caer no es fracaso, mientras sea posible levantarse una y otra vez.

Gente optimista, positiva, que irradia a través de su mirada, de sus palabras, de sus acciones una fuente de energía a su alrededor, sin hacer alarde de ello, sin siquiera proponérselo. Son seres que han visto en la vida, no un reto en donde necesitan competir con los demás, sino con la vida misma en donde los enemigos a vencer, si es que hay que llamarlos de alguna manera, son los propios miedos, la apatía, la falta de empatía, el apego a lo material que va en proporción directa al vacío interno.

Vivir siempre en pos de la felicidad, dejando a un lado la ingenuidad de una utopía, sino en la consecución de sueños realizables acordes a nuestras posibilidades y quehaceres cotidianos. Sabernos parte de un universo, de un mundo, en donde la felicidad se encuentra más allá de las fronteras de nuestro ser, que compartida se multiplica. Aprender a vivir sabiendo que felicidad no es destino, sino parte del diario camino, efímero o duradero, pero al alcance de aquéllos que entienden y llevan impreso en su corazón el valor verdadero de nuestra existencia.

Metamorfosis; video animado por ESMA