domingo, 1 de agosto de 2010

FREEDOM PSICOTERAPIA: Renacer, reinventarse.

Renacer, Reinventarse.
(Nunca Somos lo Mismo)
 
Escuchaba los pájaros y su armónico estruendo en los arboles, coincidiendo con la salida del sol, del nuevo día… y su ruido me hizo darme cuenta de que yo ya no era el mismo, que era otro en un día también distinto. Y el darse cuenta se extendió, y fue como un relámpago; ¡todo renace! Ya nada es igual que ayer. Sólo la flojera y la autocomplacencia nos hacen volver a lo mismo que tanto detestamos.
Esos pájaros también tenían una nueva oportunidad de ser, de estar. Fluían. Eran. Quizá por eso -pensé- tanta algarabía.
¿Qué voy a hacer yo con esta oportunidad? ¿Cuánto vale un día más sobre la tierra para los que ya no están? ¿Cuánto pagaría por ese sólo día si de pronto me descubriera flotando en calidad de espectro sobre las mismas casas y personas que puedo ver con los ojos físicos? ¿Si de pronto la muerte me sorprendiera y no me diera tiempo de arreglar tanta idiotez y obsesión, o mejor aún, de deshacerme de ellas?
Me olvidé de vivir, dice una canción…
Entonces se que lamentaría cada gota de sol no valorada, cada piedra llena de matices a la orilla de una banqueta que no detuvo mis pasos para observarla. Sé que me volvería a morir por una hora de ese sol desquiciante de agosto, del que tanto me quejo en la tierra. ¡Pero gracias a Dios estaba vivo!
El tesoro estaba ahí; no sólo en los arboles sino en todas partes. Fue quizá el descubrimiento más monumental de mi existencia. Era eso precisamente; ¡La vida! ¡La vida! ¡Por Dios! ¿Cómo no me había dado cuenta desde antes? Todo renace, todo se reinventa. Nunca somos lo mismo. Podemos elegir dejar de ser lo que no nos gusta. Podemos elegir no regresar a lo que éramos en el instante pasado, ser nuevos; como el presente que siempre se está yendo. Es una decisión. Hasta mis células no serán las mismas dentro de pocos días.
El verde rabioso de las hojas, contrastando con el negro azulado de esos pajarracos flacos y escandalosos, fueron el marco de una enseñanza grandiosa. Esas aves me estaban dando una lección digna de un maestro zen. No tuve que ir al Tíbet ni a la India, ni recluirme en un monasterio, ni beberme a Osho. Tuve un atisbo a la verdad antes de regresar a mi estupidez usual. La vida latía y pulsaba en ese árbol y en todo lo que me rodeaba y estaba adentro de mí.
De pronto, otro verde, el del semáforo, me sacó de mis cavilaciones. Y ahorita, sigo contando los mil motivos maravillosos para sentirme afortunado por haber amanecido. Los tordos, urracas, y zacateros, me enseñaron que quejarme de cualquier cosa, era desperdiciar la vida.
Benditos sean los pájaros que siempre se levantan cantando; una cura para el Alzheimer existencial. Vistos desde la perspectiva de no perderse el momento, son más sabios que los humanos. Me recuerdan que, ante lo que nos duele o nos tumba, pero no nos mata, volver a estar despiertos cada mañana es un prodigio. A pesar de la estupidez usual, hay siempre la oportunidad de ser distintos, de renacer, de reinventarse…
·        Versión ilustrada en archivo adjunto. Gracias por tu tiempo y por reenviar y compartir nuestros mensajes.
¡Cumplimos 12 Años!
Asociación de Psicología Humanista.
México – Costa Rica – USA
 
Freedom cumple en agosto, 12 años. Muchas gracias a mis queridos compañeros y colegas, a todos los miembros de la Red de Conciencia Social, en México y el resto de los países enlazados. Gracias a las personas e instituciones, que han sumado sus esfuerzos para dejar de pensar sólo en sí mismos y apostarle al pensamiento sistémico, a interesarse en el bienestar de los demás. 12 años de vivir en el paradigma de la colectividad. 12 años de promover la Educación Emocional. 12 años convencidos de que nuestra máxima aspiración ha valido la pena: Volver a Ser Tú Mismo… ¿Te Imaginas?
 
Mil felicidades, un abrazo fraterno y que Dios los siga bendiciendo. Los quiero muchísimo.
 
Atentamente:
 
Lic. Gabriel Rubio Badillo, Director General.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario