Tragos
Imagine una botella de vidrio oscuro, con un contenido desconocido.
A veces se toma un trago y se embriaga; con otros, se enferma.
Pero a veces simplemente sacia la sed o se siente tonificado.
Con la experiencia, aprende que lo que siente depende de lo que espera.
Así nos bebemos los años. Trago a trago de lo desconocido.
Al final del año evaluamos su contenido según nos supo.
Que obtuvimos precisamente lo que esperábamos o provocamos.
Decida ahora que le va a ir bien el año próximo. Ya verá que le sabe mejor.
jvillega@rocketmail.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario