Paz
Algo tiene la Navidad que serena los espíritus y alienta la tregua entre adversarios.
Para la mitad de la humanidad es la celebración más aglutinadora.
Al grado de no reparar muchos en que se trata de una fiesta religiosa.
Por unos días la fe se impone a la razón; manda el corazón sobre la mente.
Aceptamos las historias prodigiosas sobre estrellas, coros de ángeles y sabios de Oriente.
Para una humanidad descreída, materialista, es escape a un mundo perfecto.
No importa si la comercializan; igual hacen con el Niño, con la Madre, con la Amistad.
Importa purgar el alma y darnos la mano en paz, una vez al año.
jvillega@rocketmail.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario