domingo, 27 de marzo de 2022

2CONFETI DE LETRAS



Pareciera que la promesa de que tenemos una vida después de la muerte, le resta significado a ésta, la vida terrenal. Como el niño que se come las verduras porque se le premiará con un dulce al final, así muchos de nosotros pasamos por la vida sin apreciar toda la gama de colores, sabores que nos brinda esta única oportunidad de sentir, dolor, amor, felicidad, compasión.

¿Cómo pasar inadvertida una brecha donde se nos pone a prueba nuestra voluntad?¿cómo no dar lo mejor de nosotros cada día cuando esa oportunidad caduca y no vuelve más?

Es en esta vida y solo en ella, cuando podremos amar y ser amados sin que medie entre nosotros nada más, que nuestra mortal facultad de apreciar en el amor, la mejor energía vital. Es la única en que se pondrá a prueba nuestra fe; en la que aprenderemos o no a encontrar el significado de existir; en donde dejaremos un capítulo que sea digno de leerse, con errores, con aciertos, pero en el que dejemos más de un renglón que nos defina, como alguien que supo reconocerse falible, pero siempre busco como enmendar sus fallas. Como levantarse por dura que fuese la caída y retomar la vida, con temple, con arrojo buscando invariablemente, sin que nunca considerara fuera tarde para ello, el reencuentro con su mejor yo.

La vida eterno no es mi inspiración ni a lo que aspiro, ha sido mi intención no malgastar ésta que Dios ya me concedió, vivir sin desperdicio, sin menosprecio. Agradezco cada día estar aquí, y sin esperar premios, considero ya haber sido más que afortunada de haber nacido y disfrutado de ésta, mi vida.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario