domingo, 17 de enero de 2016

CONFETI DE LETRAS por Eréndira Ramírez


Entre penas y glorias, entre el negro y el blanco, entre reír y llorar, el ir y venir, la vida nos lleva tan rápido, que a veces en el trayecto olvidamos mirar por la ventana y disfrutar el paisaje.

Quizá por eso es que cuando el paso se lentifica, el ser humano se vuelve más receptivo y encuentra que la luna no solo es bella en octubre, y que los atardeceres son un concierto de luces y colores que no había advertido antes con tal intensidad.

Siempre con prisa, queriendo llegar, acelerada marcha con destinos que a veces no eran los deseados y de los cuales en ocasiones es difícil regresar.

Extender la mirada y recrearnos con la maravilla que se nos ofrece a nuestro alrededor antes de que el paso del tiempo nos robe la oportunidad de hacerlo.

Muchas veces será más satisfactorio el camino recorrido que el destino final, siempre y cuando hayamos sabido elegir buena compañía y mirar de vez en cuando a través de la ventana.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario