Sueña el ave con ser mar portentoso, olas y crestas
que chocan
para estallar en blanca espuma.
Sueña el mar con ser cielo, nubes quietas de algodón
y algún vientecillo gentil que lo acaricia.
Sueña el viento con ser árbol, amplio follaje verde,
un tiempo flor, otro tiempo fruto, siempre sombra.
Sueña el árbol con ser niño, cantos juegos y alegría
un sinfín de risas, un mundo de abrazos.
Sueña el niño ser adulto como el padre,
para ordenar y regañar con voz severa y ronca.
¿Y el adulto?...
Sueña el mar con ser cielo, nubes quietas de algodón
y algún vientecillo gentil que lo acaricia.
Sueña el viento con ser árbol, amplio follaje verde,
un tiempo flor, otro tiempo fruto, siempre sombra.
Sueña el árbol con ser niño, cantos juegos y alegría
un sinfín de risas, un mundo de abrazos.
Sueña el niño ser adulto como el padre,
para ordenar y regañar con voz severa y ronca.
¿Y el adulto?...
El adulto sueña con ser ave,
volar libre, jugar con el viento a ser cometa…
La historia se renueva, tiempo a tiempo.
Soñar, imaginar, dibujar con el corazón
sobre un blanco lienzo de esperanza.
Desear que el tiempo corra y nada nos despierte.
volar libre, jugar con el viento a ser cometa…
La historia se renueva, tiempo a tiempo.
Soñar, imaginar, dibujar con el corazón
sobre un blanco lienzo de esperanza.
Desear que el tiempo corra y nada nos despierte.
Soñar, soñar, y seguir soñando... Que sería de nosotros sin los sueños... y que son los sueños sino proyecciones a futuro de nuestros deseos... Abrazos querida Carmen, me encanta tu poesía.
ResponderBorrarQue Hermoso Carmen ! Me toca el corazón ♥️
ResponderBorrarQuerida Carmelita. Los sueños a pesar de los años, siguen ahí y son los que nos permiten, vivir, gozar lo que nos queda de vida.
ResponderBorrar