AGRIDULCE
Muchacha de otros tiempos que crees en el amor.
Tú que sueñas con palabras dulces dichas al oído
que recorren tu piel,
caricias
con destino al puerto de tu
pelvis.
Tú que sueñas que el amor todo transforma
con la fuerza de la mansedumbre. Pones una mejilla,
luego la otra. Luego cierras los ojos para no ver
la mano que te parte.
Para olvidar el dolor cuya marca en tu piel
no reconoces frente al espejo. Justificas diciéndote a ti misma:
“Todo tiene su precio en esta vida”. El del amor es caro, tú
lo pagas
con la sonrisa esbozada en los labios
que han sellado la duda
y un brillo vuelve a nacer en tus pupilas.
Como siempre, excelente. Saludos
ResponderBorrar