Me gustan los retos, me encanta saberme con el potencial de lograr algo. A veces el día es una amenaza de 24 horas de zozobra, tristeza. desazón, me levanto entonces con más energía porque sé que tendré que utilizar todas las herramientas con las que cuenta mi voluntad para sortear la desventura, las dificultades.
No es enfrentarme contra mi destino, porque éste es inevitable e ineludible, sino a mi actitud de derrota ante él. Cuando se muestre desalentador; sé que muy pocas cosas van a ocurrir al azar, pero creo en que por pocas que sean las oportunidades en que la suerte me eche la mano. Tengo más que evidencias de que existe, no por nada he sido tan afortunada de estar siempre rodeada de el cariño sincero de tanta gente. No todo es causa y efecto, hay cosas que han arribado a mi existencia sorprendiendo a mi destino, por buena o por mala suerte, he sido testigo también de milagros,
Así vivo, mi libertad aliada a mi destino, mi decisión y libre albedrío con lo que la vida me tiene deparado. Mi lucha es para aceptar mi destino, sin sentirme vencida.
Mi filosofía es esa lucha diaria contra todo aquello que me impida avanzar, sean mis miedos, mis prejuicios, la pereza, la falta de ambición por ser, por sentir, por vivir plenamente todos y cada uno de los días del resto de mi vida. Gozar de aquello que el destino, la suerte, mi libre albedrío me ofrezcan, esperando siempre que mi fe en Dios me dé la certeza de sentir que no estoy sola.
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